Arrepiéntete y Cree en el Evangelio antes de que sea demasiado tarde.
La Vidente y Profeta María de la Cruz.
Nueva visita a las Cárceles del Infierno
18 DE JULIO DE 2010
10:00
“Amada Mía”
-¡Oh!, mi Señor, bendito seas mi Jesús.
Jesús me vuelve a tomar de la mano y vamos a otra de las cárceles del Infierno, al llegar al lugar alcancé a escuchar una voz muy débil diciendo:
-¡hay!, ¡hay!, ¡Jesús!, ¡hay!, ¡hay!, ¡hay!, Jesús, ya no puedo más ten piedad de mí, llévame contigo ya déjenme descansar…
El cuerpo de esta alma estaba en forma de calavera ya no tenía carne, pues ya se había quemado, solo se le ven los huesos todos negros, lo que sí observo es que todavía tienen sus ojos completos, unos ojos saltones que se movían de un lado para el otro como si hablaran con ellos:
-¡hay!, ¡hay!, ¡hay!, -volvía a decir- ya no quiero ver a estos demonios que me atormentan, tampoco quiero ver las infamias que hacen conmigo, ya no quiero sentir lo que me hacen, por piedad Jesús sácame de éste lugar, Señor Jesús te imploro que me perdones, yo reconozco que me equivoqué, Tú me llamaste muchas veces que regresara al redil y no te hice caso, preferí ser una mujerzuela, una mujer galante, me confieso ante Ti, Bendito Juez de los hombres, ¡hay!, ¡hay!, ¡hay!, perdóname porque te ofendí en la bebida pues me emborrachaba hasta perderme, fui una mujer fácil, por favor perdóname, yo me integré con otro grupo de personas que no eran Católicas; eran solamente Cristianos y ahora sé que pertenecer a otra religión, es salirnos de Tu Rebaño, ¡hay!, ¡hay!, ¡hay!, Jesús, ahora sé que Tú Ley es única, ahora sé que fui una víctima más de Satanás, aunque reconozco que yo sabía bien lo que hacía, ahora entiendo que hay que arrepentirse antes de nuestro Juicio personal Contigo, pero dame otra oportunidad Jesús, ¡hay!, ¡hay!, ¡hay!, te prometo que seré buena.
Los ojos parecían salirse de su lugar; pero era la desesperación que sentía esa mujer, pobre mujer, de pronto las lágrimas se me salen y me digo ¡hay que dolor!; pero ya Jesús no puede hacer nada por ella, nada, vivirá así toda la eternidad, que pena.
Seguimos caminando y llegamos a otra cárcel de fuego, nos paramos frente a ella, y dijo Jesús:
Ésta alma que está en esta cárcel fue una persona que no fue bautizada, ni se acercó nunca a Mí, no quiso conocerme, nunca creyó ni en el Cielo ni el Infierno, él gritaba a los cuatro vientos:
-yo no creo en nada de eso, son puras pamplinas, que se vayan de aquí todos los que quieran hablar de religiones, son vanas, son mentiras, puro negocio, solo piden dinero, dinero y más dinero, dinero es el que yo gano.
Yo lo invite muchas veces a través de los amigos:
-Anda, yo seré tu Padrino de bautizo, ven vamos a misa, no te niegues, deja de beber y de fumar mira que eso no te hace nada bien
pero él contestaba:
-déjenme, yo sabré que hago con mi vida, déjenme vivir mi vida como yo quiera.
Los amigos se fueron retirando y empezaron a dejarlo solo, hasta que un día vino a él la muerte. Este hombre fue, necio y rebelde, hasta ahora que quedó por siempre en este lugar, pues todavía en su Juicio Personal no creyó en Mí, pues ahora que conozca a Mis enemigos, espera para ver que le hacen también…
Apenas dijo estas palabras Jesús, cuando una estampida de demonios entraron y tomaron al alma que estaba refunfuñando diciendo:
-¡eh!, bola de murciélagos ya van a empezar a golpearme.
De pronto empezaron a arrancarle la carne a pedazos y el hombre gritaba:
-¡hay! malditos déjenme ya no me hagan sufrir.
Uno de ellos le dice:
-ahora vas a saber quién es tu Dios,
el hombre le contestó:
-yo no conozco a ningún Dios, ya párenle déjenme en paz, tráiganme mejor una botella de vino del más fino.
Pero los demonios empezaron a golpearlo más y más y le gritaban burlándose:
-no te dejaremos de golpear hasta que reconozcas que Satanás es tu Dios, hasta que te enseñes a doblarte ante él.
El hombre rebelde les decía:
-Yo no sé quién es Dios, si ustedes quieren
mejor yo soy su Dios.
Los demonios se burlaron de él
-¿tú nuestro Dios?, ja, ja, ja, ja, ahora te mostraremos quien es Satanás.
Dicho esto, se forma un torbellino negro y apareció la figura de Satanás, con una voz media ronca que le dice:
-Yo soy el rey del Infierno, ¿eres tú el iluso que no cree en mí?; pues ahora vas a saber que yo soy el que tiene el poder.
Satanás hace un movimiento como de círculos con las manos y comienzan a crecer las llamas de la cárcel y a aumentar el calor del fuego del Infierno, entonces el hombre empezó a gritar:
-no, no, el calor no, no por favor, haré lo que me piden estos necios estos demonios,
-¡ha!, -dijo Satanás- ahora vas entendiendo que yo soy tu Dios.
-Yo nunca creí en ningún Dios- grito el hombre-, pero si quieres que crea en ti pues creo, solo porque me duele, déjame de atormentar con el fuego, pues es a lo único que le tengo miedo y desgraciadamente de eso morí, ya dejen de pegarme, ya estuvo bueno. ¡Hay!, ahora entiendo todo lo que me decían mis amigos, ¿por qué no les hice caso?, creo que sí hay otro Dios, el que me decían mis amigos, ese Dios del Cielo y ahora ¿Cómo le haré para encontrarlo?, ¡hay! si los hubiera escuchado en vida, ahora sé que este es el Infierno, pero al Cielo ¿cómo lo encontraré?, -y empezó a decir- Dios del Cielo, Dios del Cielo, ven a mí,
Jesús le dice:
Yo soy Jesús, el Hijo del Verdadero Dios al que clamas en este momento, con mucha pena te digo, tú fuiste Conmigo después de morir, Yo te hice tu Juicio personal...
-¡Ah! sí; pero ¿ahora qué hago?, estos montoneros siempre me vienen a pegar y a hacerme sufrir, dime Tú ¿qué hago para ir al Cielo?.
Amorosamente le responde Jesús:
Nada, ya no puedes hacer nada, cuando Yo te pregunté si te arrepentías y te explique lo que no entendías, tú dudaste y Yo conozco
el corazón de los arrepentidos y Tú Me ofendiste en lugar de arrepentirte, ahora ya no puedo hacer nada por ti, quedaras confinado al fuego del Infierno toda la eternidad.
El hombre por primera vez empezó a llorar:
-¡hay de mí!, ahora entiendo lo que mis amigos me decían, fui un necio, un majadero, con Dios, Dios yo me arrepiento de verdad, yo me arrepiento, porque no le hice caso a nadie, yo me arrepiento, que me azoten por malo, por dudar. Si hubiera aceptado el bautizo y me hubiera acercado a Dios en vida, creo que el que aquí me habla tiene toda la razón, yo no conocía esto y me negué a conocerlo, ahora sufro los tormentos de éste lugar, ¡Dios perdóname!, me arrepiento de verdad, no merezco ni siquiera que me hables pero tú estás lleno de amor, de bondad, cuando menos déjame decirte Hijo de Dios, gracias por venirme a recordar todo lo malo que fui, yo sé que no saldré de este lugar, pero te pido por todos los que viven en la Tierra, perdónales sus pecados, para que no vengan a sufrir en el fuego de este Infierno, en este lugar de tormentos pues en verdad se sufre.
Jesús dijo:
“Padre Mío, si es Tu Voluntad ten Misericordia de esta alma”.
La Boca del Estómago del Infierno
Dice Jesús:
Hay un lugar semejante a la boca del estómago del Infierno, más arriba del vientre, ahí van almas en donde hay efectos como si el mismo lugar vomitara o quisiera vomitarlos por sus pecados.
Las almas que llegan a este lugar, son muchas almas que en vida fueron brujos, hechiceros, chamanes, que dieron de comer a muchas personas comidas y bebidas con efectos del maligno para hacerles daño a otras personas, con conjuros obscuros y rituales de maldad. A estas almas, Satanás les dio su premio prometido, y los ha enviado a este lugar de castigo, como el vómito saca el alimento de su vientre para no regresar jamás. Esto quiere decir, no regresará jamás a la Tierra y nunca jamás podrá salir de este lugar de tormento. Ahora les dejo esta reflexión:
“¿no os ha de llamar a juicio el que castiga a todas las naciones?”
Estas almas creyeron y adoraron a Satanás y Yo su Justo Juez, los he vomitado al fuego del infierno, por haber creído en su falso dios, por creer en el maligno.
Pues Yo ahora les digo: “Adorad a Yahvé en su Santa morada. Conmuévanse a su vista toda la Tierra.
11
Visita al Centro de Placer.
Ahora Jesús me lleva a otro lugar, que le llaman el centro de placer, a ese lugar llevan a las almas en donde los tormentos son diferentes, las almas son las que están en el centro de un circo, esas almas con las que divierten a Satanás, son los brujos, los magos, astrólogos, espiritistas, los grandes maestros de la brujería, son las almas que fueron entregados totalmente a Satanás, las huestes atormentan de todas formas a las almas que están en el centro del circo, este es el lugar de placer de los demonios, son su gran diversión.
-Qué pena, que tristeza Señor le dije, ¿pero cómo te ofendieron Señor?
En verdad te digo Mi niña, en verdad Yo vine a salvar a todos los hombres pero no entienden, tendrían que nacer de nuevo, para que cambien sus corazones, sus actitudes y ya no pequen, para que Yo los perdone.
-Hay Jesús cuanta maldad en los hombres, a
mí, te suplico me perdones. Jesús sonríe de nuevo y me dice:
Las almas que están en los hoyos de fuego no pueden venir a este lugar, está prohibido. Éste lugar tiene la forma de un circo, pero hay otras almas y demonios que son traídos a ese centro de placer, para entretener a Lucifer, Satanás a demonios grandes, las almas que traen aquí -dijo Jesús-, son aquellas personas que definitivamente por su propia voluntad siguieron y sirvieron a Satanás en vida, en vez de seguir a Yahvé, estas almas al ser traídas al centro de placer sirven para entretener a los demonios mayores, estas almas fueron en la Tierra espiritistas, adivinos, brujos, hechiceros, etc. A estas almas, se les permite atormentar a todos aquellos que engañaron a los que invitaron al pecado a los que les creyeron. Entonces la diversión en el centro del placer, consiste en que los demonios más pequeños les hacen a las almas todo lo que ellos hicieron como maleficieros, así divierten a los demonios grandes así mismo son torturados, por ejemplo, les cortan parte de sus huesos y son enterrados en los Infiernos a los que en vida les hicieron un ritual o un acto malvado, el que utilizó sangre de un inocente o de un animal, así mismo los atormentan, a otras almas, varios demonios los cortan en pedazos y los esconden en diferentes lugares del Infierno, como para jugar a las escondidas, otras almas tendrán que encontrar esos restos y traerlos al circo del Infierno que es el centro de placer de los mismos Infiernos.
Veía yo cómo se divierten los espectadores, ¡que grandes horrores!, todo el lugar olía a carne podrida, tan fétido que casi devuelvo el estómago, poco faltó de salir corriendo de ese lugar de tanta maldad que estaba viendo, de tanta asquerosidad que hacen ahí dentro. Los espectadores les aventaban fuego y piedras todas sucias llenas de polvo negro, a todos los que estaban en el centro. Jesús me dice:
¿Ya ves cuanta maldad hay en los Infiernos?, pues todavía se les permite a los demonios hacerles más vejaciones.
Jesús no me permite revelarlos, pues lo que hacen son tormentos y vejaciones todavía más terribles, también quiero decirles que las almas al ser atormentadas, humilladas, vejadas, gritan de dolor, y suplican a Satanás los perdone, que prefieren alabarlo y hacer lo que les pidan, otros gritan de dolor y desesperación y suplican que ya no los atormenten, que ya no les quiten sus carnes, pues ellos sienten, que ya no los quemen, otros piden la muerte de nuevo, pues ya
no quieren sufrir en ese Infierno.
Dice Jesús:
Quiero revelarte ahora María de la Cruz, que después de que Yo muriera en la Cruz, Yo le quite las llaves del Infierno a Satanás y rescaté de las cárceles a muchos hijos Míos, pues estas cárceles estaban antes en el Paraíso, (pues el Paraíso estaba muy cerca del Infierno), pero actualmente Satanás ocupa este espacio para sus fines, y ha hecho más cárceles y el Paraíso fue removido de lugar cuando Yo Morí y Resucité.
A todas estas almas en vida, los invité a escuchar los Evangelios, a cambiar su forma de vivir, de pecar, de ofender a Dios, los invité a venir a Mí, al arrepentimiento y no quisieron, está su voluntad y su libre albedrio, pero sobretodo les ofrecí su salvación, pero no quisieron, entonces sufrirán por siempre lo que ahora saben.
-Es cierto Jesús, todo lo que he visto es horrible, pues no te escuchamos Jesús, en verdad yo me arrepiento de todo corazón mi Señor, pues yo no quiero sufrir estos tormentos.
Hermanos, los sufrimientos que tienen las almas en el Infierno son horribles, en verdad sufren terribles tormentos, no te condenes hermano, vamos a seguir a Jesús, vamos a buscarlo para que nos perdone, porque es mejor vivir eternamente en el Cielo, pues ahí no se sufre.
Jesús agrega esto:
“HIJOS MÍOS TODO AQUEL QUE ME SIGA TENDRÁ LA SALVACIÓN ETERNA, YO NO COBRO LAS BUENAS ACCIONES NI UN BUEN ARREPENTIMIENTO, PERO SATANÁS SI LES COBRA A TODA ALMA QUE SE PIERDE, TAMBIÉN OS DIGO QUE TODO AQUEL QUE HAYA HECHO UN PACTO CON SATANÁS, YA SEA VERBAL O POR ESCRITO, YO HE DE ROMPER TODO PACTO CON EL PODER DE MI SANGRE DERRAMADA Y ROMPERÉ TODO TIPO DE MALDICIÓN Y LO SALVARE DEL INFIERNO. SOLO TE PIDO, DAME TU CORAZÓN Y ROMPERÉ LAS CADENAS PARA QUE TENGAS LIBERTAD Y DESATARE TODA ATADURA DEL MAL”. AMEN, AMEN, AMEN.
12
De regreso al Centro de Placer o Circo del Infierno
16 DE AGOSTO DE 2011
12:30 HRS.
Cuando Jesús me dijo que iríamos nuevamente al Circo del Infierno, Inmediatamente pensé ¿porque al circo?, pero lo que Jesús desee que vea está bien, cuando llegamos a él estaban muchos demonios sentados alrededor de la pista esperando la gran función del día de hoy, en medio estaba una mesa igual que la de los sacrificios del templo de los Illuminati, de pronto entran varios hombres de negro con un sombrero como tipo español, cargando a un hombre todo tieso y cadavérico, los hombres decían ¡Oh! salve Baphomet, los grandes demonios que estaban en las sillas reales del Infierno, Lucifer, Satanás, Rhá, Belcebú, Leviatán, Hazazel y Belial se pusieron de pie. (Estos son los 7 gobernadores del Infierno)
-Aquí tienes a tu hijo, Baphomet.
Satanás hizo una señal y sentaron,
Momo, como siempre con sus imprudencias dice:
Lucifer aquí está tu hijo Anton Szandor La Vey (Momo es el demonio de la Burla)
dice Jesús:
Éste hombre fundó una secta llamada Church of Satán, en Estados Unidos; sigue observando María de la Cruz.
Después de que momo interrumpió, Lucifer se pone de pié diciendo:
-Mejor di momo quien soy yo, porque yo soy el que soy
Momo vuelve a interrumpir
-Sí, sí, sí, tú eres el disfraz del gran rostro del que nada sabe y te llaman estos idiotas Baphomet, tú eres el Sión, el que da el placer y la lujuria, eres a quien la humanidad te clamará un día.
Lucifer lo interrumpe
-Ya cállate de decir tantos discursos cursis, mejor que comience la diversión.
Ahora, los hombres de negro, quienes pertenecieron a la secta de los Illuminati y traen a su gran fundador, se acercan y dicen:
-¡Oh! Señor, aquí está el alma de Antón, te lo ofrendamos como él nos ofrendó a nosotros a ti.
Lo acomodan en la mesa de sacrificios y el hombre de pronto abre los ojos y dice:
¿Qué estoy haciendo aquí?
Pero cuando ve a Satanás se asusta y grita:
¡Nooo!, ¡otra vez no!, no me hagan lo mismo,
Momo que brinca de aquí para allá se acerca y le dice:
-Cómo que no… ahora que comience la diversión,
Muchas mujeres vestidas de largo y de negro se acercaron a él, con grandes guadañas formando su símbolo, el de la estrella de cinco picos.
Jesús me dice:
Este es un pentáculo invertido,
Pero en medio de éste símbolo, fue el mismo Antón quien se empezó a transformar en un chivo con unos cuernos muy grandes, con unas barbas negras, su cuerpo de rojo y negro, ¡que horrible!
Momo le dice:
Y no te quejes, que ahora te irá mejor que otras veces.
Momo hace una seña a otros demonios y comenzó a arder alrededor de la pista del circo, Antón, en forma de ese chivo demoniaco, salta de la mesa y empieza a correr cerca de las llamas de la pista, buscaba una salida de ellas; pero de pronto apareció un gran demonio con cara de chivo también, empezó a perseguirlo en forma de chivo hasta que lo alcanzó con sus largos cuernos picudos, el demonio lo quería ensartar; pero Antón, dentro de su desesperación decide mejor enfrentar al otro chivo demoniaco, se daban fuertes topes y brincaban de manera que se lastimaban, mientras los demás demonios que estaban como espectadores empezaron a gritar:
-Sión, Sión, Sión…
Momo gritaba a un lado de la pista diciendo:
-¡Muerte a los cultos de esclavos!,
Una gran batalla fue la de los dos chivos, hasta que el mayor demonio hirió de muerte a su contrincante, momo corre y le alza las pezuñas al ganador. Entonces las mujeres se acercan con sus guadañas y con ellas hieren más el cuerpo del hombre, provocando fuertes dolores que lo hacían gritar:
¡Ya no por piedad!, ¡ya no!.
Carcajadas y burlas de todos los demonios se oían.
-¡Todo lo que él hizo en la Tierra lo hemos de disfrutar! – gritó Satanás,- Que siga la diversión.
Antón desesperado, con sus carnes todas rasgadas, gritaba de dolor:
-¡Hay!, ¡hay!, ¡ya no me hagan esto por favor!
De pronto, llego otra vez el demonio grande en forma de chivo y le dijo:
-Ahora me toca otra vez a mí
Pero no venía solo, otros demonios con cara de chivo se empezaron a formar detrás de él, el chivo saltó sobre Anton y empezó a abusar de él sexualmente.
El demonio le decía:
-¿Te acuerdas que abusaste de mujeres y niñas y te metiste con casadas y soleteras y no respetaste ni a los hombres?, pues ahora sentirás el placer que les diste, ja, ja, ja, ja.
Así pasaron muchos demonios, hasta que lo dejaron todo golpeado, abusado, sangrado y llorando como un niño, tirado en medio del circo y se decía así mismo con una voz totalmente sin aliento:
-Yo no me merezco esto, yo soy el gran líder de Sión yo no he muerto, ¿Porque me hacen esto?
Momo le gritó:
Y todavía lo que te falta.
Jesús me dice:
Lo demás, no te lo puedo mostrar, pero todo lo que hizo en la Tierra, se lo están agradeciendo los demonios pues su premio es que sufra eternamente en el Infierno y así terminará todo sectario si no se arrepienten a tiempo.
Estos son los hombres que se sienten más que Yahvé, o como dicen en otros lugares Adonaí o su Joshua, se sienten dioses, son éstos los dioses falsos y cuando mueran han de encontrar más rápido las puertas del Infierno.
“ARREPIÉNTANSE, PORQUE ESTO ES LO QUE QUIERO EVITARLES, EL SUFRIMIENTO ETERNO DEL INFIERNO, QUIERO QUE SE ARREPIENTAN Y VAYAN TODOS A MI CIELO”.
Ahora María de la Cruz, decidle al mundo lo que quiero de Mis hijos que tu esposo José lo escriba en el libro.”
13
Visita a los brazos del Infierno
13 DE JULIO DE 2011
09:00 HORAS
En este día me encuentro llena de alegría porque Jesús acaba de llegar, un suave aire fresco pasa sobre mí como si acariciara mis mejillas, Jesús me dice:
Este es el Espíritu Santo que viene a ti, María de la Cruz, ahora vamos a otro lugar,
-¿A dónde iremos Jesús?,
Vamos a la mano derecha del Infierno.
Por un momento pensé ¿qué veré en ese lugar?, pues todo es terrible, en cuestión de segundos llegamos a un lugar, se trataba de un monte no muy grande y muy árido, estando en lo alto, mis ojos voltearon a ver hacia abajo.
-¡Mira Jesús! se alcanza a ver un río, mira como corre por las orillas de este monte, Jesús, ¿por qué se siente tan frío y porque se siente una soledad terrible?, Jesús me dice:
Observa bien el río…
De pronto el agua ya no era agua, sino sangre y empezaron a salir unas llamaradas muy grandes, entre estas llamas se empezaron a ver muchas almas que estaban encadenadas juntas y luego el mismo fuego las sumergía hacia abajo del río, otras almas parecían que tenían un rocío como se ven las plantas en la Tierra, como cuando el rocío de la mañana está sobre los pastos verdes, pero aquí es diferente, es un roció como grisáceo y negro. Jesús me dice:
Estas almas fueron incrédulos, estas almas amaron más la carne que a Dios, pues ellos tuvieron amores, hombres con hombres y mujeres con mujeres y no quisieron arrepentirse de su gran falta de respeto a Dios, pues Dios hizo al hombre para la mujer y la mujer para el hombre, sus pecados fueron muchos y no quisieron arrepentirse, Yo los invite a que cambiaran de vida, de manera de ser y despreciaron la oportunidad que les di para salvarlos.
Repentinamente, se empezaron a escuchar ruidos que salían de dentro del río y había una silueta de un gran animal que devoraba todo lo que encontraba a su paso, las llamas del río fueron creciendo, como si quisieran llegar a nosotros. Con esa mirada de ternura Jesús volteó a verme, y me dice:
Yo siento mucho amor por todas las almas que están aquí y las compadezco pero ya no puedo hacer nada por esas almas que constantemente sufren los tormentos del Infierno.
Las almas se movían como si las aguas estuvieran agitadas, yo alcanzaba a percibir gritos de dolor, gritos de arrepentimiento, gritos de remordimiento:
-¡Oh Jesús si me hubiera arrepentido a tiempo no estuviera yo aquí, estuviera contigo, -así decían las almas, otras imploraban Misericordia a Jesucristo-
-Jesucristo, sálvanos
Pero Jesús les dice:
Yo les dije en su Juicio personal:
¿Te arrepientes de todos tus pecados?
Y muchos contestaron:
¿Cuáles pecados? yo no me acuerdo, otros me dijeron que no tenían pecados, y cuando se les recordaron los negaron, arrepiéntete antes de morir les invite a otros hijos Míos y no quisieron, pues ahora sufren en este río de dolor eternamente. María de la Cruz, estas almas ofendieron gravemente a Yahvé, pues amaron su mismo sexo, haciendo lo que no es correcto, ellos indujeron a muchos jóvenes al pecado y ese pecado les ocasionó la muerte. También te revelo que todo aquel que haya sido forzado, obligado, violado, en contra de su voluntad, Yo no juzgaré mal este acto en los inocentes, pues Yo conozco todas las cosas y conozco los corazones; pero a los que ocasionaron estos abusos, Yo los condenaré al fuego del Infierno. Hija mía, Yo su Jesús Juzgaré con Justicia a los justos, a todos los hombres que quieran arrepentirse les daré toda Mi Misericordia, el que clame a Mí, Yo lo escucharé y escudriñaré su corazón y lo perdonaré. Y aún más, todo aquel que renuncie a las cosas inmundas entonces Yo su Jesús los recibiré.
El dolor que siento es muy grande pues muchas almas son arrastradas por el río y en verdad se queman con el fuego, por más que buscan Mis hijos desesperados alguna salida, no hay ninguna salida, no hay esperanza ya no hay nada más que vivir sufriendo y soportar los tormentos de los demonios.
-Las llamas más altas van formando olas que al entrar al río de sangre arrastran a las almas hacia el fondo, en sus puros esqueletos, que feo y sienten que se ahogan, que desesperación.
Jesús me dice:
Este es el momento en que esas almas sienten arrepentimiento, aunque demasiado tarde.
Jesús me toma de la mano y me invita a seguir caminando hasta que llegamos a otro monte no muy alto, al llegar arriba me quedé sorprendida pues estaba ahí un árbol todo quemado y del árbol colgaba un columpio y en el columpio estaba una mujer sentada columpiándose, que raro me dije a mi misma, ¡Hay Dios mío! Exclame; ¿pero qué es esto? esa mujer tenía 7 cabezas y 10 cuernos, no parce una mujer normal, Jesús quien conoce mis pensamientos me dijo:
Mirad hija Mía: “Este es el gran Misterio de Babilonia”, esta es la madre de las abominaciones en la Tierra, también pertenece al infierno, ella posee una fuerza maligna muy grande, y ella tiene la Sangre que derramaron los Santos y los Profetas que fueron muertos, la Sangre de los mártires, ahora observa María de la Cruz…
Fue hasta entonces que pude observar como debajo de la mujer curiosamente le salían lenguas y vi muchísima gente. De pronto, Jesús extendió su mano y dijo esto:
“Salid de ella y queden separados” porque esta mujer en su tiempo será destruida.
Jesús me vuelve a tomar de su mano, yo me siento segura pues ir con Él me da confianza y fortaleza para soportar todos los horrores que se ven en los infiernos. Cuando pasamos a un lado de la mujer sentía que los cuernos me aprisionarían, pero Jesús me dice:
Anda, no tengas miedo,
De pronto todo se oscureció, pero con la luz de Jesús seguimos caminando hasta llegar a otro monte, en ese lugar se empezaron a ver llamaradas como si el aire estuviera prendido y un calor sofocante, se sentía un calor insoportable, Jesús me lleva a darle vuelta al monte y de pronto apareció una puertaque estaba cerrada con muchas cadenas y candados muy grandes, de pronto apareció una figura de hombre muy grande, con una capa negra, se paró frente a la puerta, parecía un hombre ya muy anciano, arrugado, es tan flaco que sus huesos se le notaban de la piel tan delgada, pensé que raro hombre quien será, Jesús me dice:
Este hombre tiene más de mil años de edad, es un viejo necio y cansado, si abre esa puerta encontrará el abismo lleno de fuego del infierno.
Las llamas crecían y crecían más alto, se sentía tanto calor, que parecía que se iba a romper la puerta.
Dice Jesús:
Te voy a revelar algo más hija Mía, porque esto que verás sucederá en el final de los tiempos.
Jesús movió su mano apareciendo una pantalla muy grande.
Ahora observa y escucha: “El final de los tiempos están muy cerca y Yo su Jesús invito a todos los pecadores al arrepentimiento, para que sean salvos”
Después de decirme esto, empecé a ver a un demonio en forma de serpiente con fuego, que furioso se lanza contra el aíre, su larga cola la mueve como si azotara al aire.
-Señor, Jesús, está atacando al aíre.¿Este es un gran combate espiritual?
Jesús me contesta:
Así es pequeña Mía
Yo observe todos los movimientos de este demonio tan poderoso y tan ágil.
Este demonio no puede atacar a la tierra hasta que no se cumplan los sucesos descritos en Apocalipsis.
Minutos después el demonio en forma de serpiente de fuego cuando se da cuenta que ya no puede hacer nada, molesta y enojada, se desquita con el aire, da fuertes chicotazos con su cola y se regresa al brazo derecho del infierno.
Jesús agrega:
“ESTO LES DIGO A TODOS LOS HOMBRES DE MI IGLESIA: TODO EL QUE SE ARREPIENTA DE SUS PECADOS LO SALVARE DE LAS LLAMAS DEL INFIERNO”. Amen, amen, Amen.
Visita a la Mano Derecha del Infierno
18 de Enero de 2011
11:28
Jesús llega y me invita a ir al Infierno, ahora se presentó y me dijo:
¿Estás lista María de la Cruz?
-Sí, sí mi Señor, estoy lista
Hoy iremos a la mano derecha del Infierno.
Entramos por el cono que nos lleva a la mano derecha e inmediatamente lo primero que vi fue a unos demonios arrastrando a unas almas con cadenas, son personas que en vida fueron homosexuales y lesbianas, ahí abajo los meten en esos cazos o fosas de fuego; pero los encadenan como si fueran parejas, hombres con hombres y mujeres con mujeres, hay muchas fosas, muchos túneles; pero se ven demonios pequeños que están al acecho de las almas que llegan para atormentarlas, las almas están encadenadas espalda con espalda y esos demonios pequeños los atormentan. Unos imploran a Jesús, imploran el perdón, sobre todo las mujeres. Las almas que ya tienen tiempo ahí, ya no tienen cabello, tienen poca carne porque se les cae en pedazos, oliendo espantosamente a azufre y a carne podrida carbonizada. De los huesos donde eran sus partes genitales, les salen asquerosos gusanos negros.
Luego, seguimos caminando por un túnel y llegamos a otro espacio donde hay como casas, vi una casa grande, es la casa de la muerte, ahí sale un demonio muy grande con unos cuernos que crecen, esos cuernos llegan hasta la Tierra, como entre nubes oscuras; pero de esos cuernos largos salen demonios para destruir al mundo, para invitar a pecar a los hombres.
Visita al Brazo Izquierdo del Infierno
14 DE JULIO DE 2011
10:30 HORAS
“Pequeña Mía, buenos días”
-Aquí estoy Señor, muy buenos días Jesús, con la alegría y el gran gozo que siente mi corazón al verte, yo sé que hay mucha gente que siente lo mismo, pero también quisiera que todos por igual lo sintieran. Ahora Jesús ¿a dónde iremos?
“Te llevaré al brazo izquierdo del Infierno”
Cuando entramos observé de nuevo varios montes, caminamos hacia uno de ellos, ahí todo es árido y quemado, mucho polvo negro, hay un camino que tiene hoyos con fuego en donde hay almas que pecaron con sus manos y brazos, unos por tomar dinero que no era suyo, otros porque robaron otros objetos, otras almas que pecaron tomando a los hombres o mujeres por la fuerza, que violaron, esos que con sus brazos y manos golpearon a un hijo, a su padre o su madre terrenales, aquellos que levantaron el brazo para maldecir a un hijo, un hermano a un amigo o a Dios mismo, ahora estarán sufriendo en el fuego del Infierno eternamente en este brazo izquierdo todos aquellos que utilizaron su brazo junto con su mano para las maldades, para el pecado. Aquí, las almas siempre gimen, gritan de dolor, suplican el perdón de nuestro Señor Jesucristo, claman a Dios ¡piedad! y a mi Madre Santísima le suplican su intercesión; pero ahora que yo he visto el Infierno hermanos, por ningún motivo entraría de nuevo aquí, solo he aceptado venir este tiempo en que Jesús me ha revelado que el Infierno existe; porque Jesús mismo quiere que le dé testimonio al mundo, pues ahora se yo misma que se sufre y se llora.
Por eso hermano, conviértete a Jesucristo, pídele Misericordia, pídele perdón con todo tu corazón y veras que Él te perdona, sálvate hermano, escucha los Evangelios con devoción son muy importantes. Ahora Jesús me dice esto:
Escuchen todos los Ministros de la Palabra de Dios, no enseñen a Mi pueblo a pecar contra Dios, enséñenle que Yo soy su Jesús el Salvador, el que quita los pecados, el que los borra, el que los olvida, a todo hijo verdaderamente arrepentido, también os digo, el que tenga ojos que vea, el que tengas oídos que escuche, ¿que acaso Mi Padre el Creador de todos no les dio esos hermosos sentidos?, porque Yo no estoy ciego ni sordo, estoy en todo, pues todo lo veo, todo lo sé, aunque el hombre no me vea Yo veo todo lo que hagan, a Mí nadie me engaña, pues conozco perfectamente su corazón. Te hago este llamado Hijo Mío, no profeses lo que no sabes, no enseñes falsas doctrinas, no descarriles a mis ovejas, no le cambies ni una palabra, ni un acento ni una coma a la Palabra de Dios.
Yo su Jesús, quiero darles Paz en sus hogares, vivan en armonía con Yahvé, unidos en el amor que es lo que Yo les he enseñado, como la Sagrada Familia, con Jesús, María y José, que la tristeza se convierta en armonía, siéntanse consolados porque Yo los estoy consolando, siéntanse amados porque Yo los amo con todo Mi Corazón.
A todos los que tengan Dones Yo los he estado preparando, desde su nacimiento, a otros desde niños, jóvenes, adultos, todos ustedes han sido ungidos para predicar el Evangelio, para sanar a los enfermos en Mi Nombre, para expulsar a los demonios en Mi Nombre, para invitar a Mis hijos al arrepentimiento, a todos Ustedes los conduzco como parte de Mi Ejército, el Ejército de Mi Madre, a los que dijeron sí a nuestro llamado, pues todos ustedes fueron escogidos porque, en su vida de algún modo sufrieron y de sus pecados se arrepintieron y Yo su Jesús los he llenado de Espíritu, los he bendecido de una manera especial, dándoles una Santidad Espiritual especial, porque en Ustedes se han de cumplir las Profecías y harán Mi voluntad. Yo Jesús hablaré con algunos de ustedes, cuidare de ustedes, los protegeré y trabajarán unos para Yahvé, otros para Mi Madre y otros para Mí; formo con ustedes grupos tan grandes como los Ejércitos de Mi Cielo, los voy puliendo de conformidad se den los tiempos, las ocasiones o las misiones para luchar en contra de los enemigos. Ustedes son aquellos que se han tornado a Mí, sin poner un pero, que se entregan con todo su corazón, alma, mente y espíritu, este es el verdadero Ejército dispuesto a servirle a los Cielos desde la Tierra, Yo su Jesús los he elegido entre los pueblos, ciudades, países muchos se escamarán por algunos hijos Míos que he escogido, para estos tiempos verán a muchos de ustedes haciendo grandes hazañas en Mi Nombre, pues este es Mi gran poder que se me ha dado desde Mi Padre, pues os digo “MIRAD MI PODER EN MIS OBRAS”. Lo que si les recalco a todos ustedes es queestén siempre limpios de pecado.
Todo esto fue dicho por el Profeta Joel: “Habrá gente que serán llamados para el ejercito del Señor, Yo les daré los dones a través del Espíritu Santo, y a través de esa gente se harán las grandes obras del Señor y harán maravillas en Mi Nombre, y todo para la Gloria de Dios”. Y el Hijo de Dios, siendo justo se levantará con santidad en sus alas y acabará con los malignos y los hará cenizas quedando bajo sus pies.
A todos Mis Hijos Ungidos Sacerdotes, cumplan con su ministerio, inviten a Mis hijos a los confesionarios, no se hagan sordos, enséñense a perdonar, no griten, no se nieguen vayan a los confesionarios, pues bien saben que ahí también estoy Yo.
En vedad os digo, Yo derramaré Mi Espíritu sobre Ti María de la Cruz y en José y en todos Mis Ejércitos del Mundo, y os aseguro que sus Hijos profetizarán también, pelearán contra las fuerzas del mal y serán destruidas muchas obras de Satanás. Ustedes ayudarán a convertir a muchos hijos Míos, antes de que se presente el Anticristo.
Ahora salgamos de aquí, es hora de volver a la Tierra, diles a todos que los Amo con todo Mi Corazón y les repito que “los sigo amando hasta el extremo” “SÁLVENSE HIJOS MÍOS Y CONFÍEN EN MÍ”. Amén, Amén, Amén.
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